La llegada de nuestro segundo bebé es maravilloso, pero también puede causar muchas dudas en la dinámica familiar y en especial en nosotras las madres. Una de las preguntas más usuales que podemos hacernos es ¿Ahora como reparto mi amor?

El amor de una madre o de un padre es incondicional y puede repartirse por igual a nuestros hijos; sin embargo hay que tener en cuenta que el hermano mayor puede tener muchas preguntas desde el embarazo hasta el nacimiento que pueden hacerlo sentir confundido y preocupado.

A continuación encontrarás algunas pautas y recomendaciones para que nuestro hijo mayor supere con mayor facilidad esta etapa:

• Primero: Decirle la verdad sobre la llegada del hermano menor. Podemos contarle el típico cuento de la semillita que va creciendo en la pancita de mamá. Cabe resaltar que es importante que esta conversación surja de forma habitual, sin forzar o reunirse estrictamente para ello.
• Segundo: Es importante darnos cuenta, que nuestro pequeño no entenderá con facilidad como es un bebé, excepto ya esté en colegio, si nuestro caso es el primero es recomendable no forzarlo a entender y darnos cuenta que todo es un proceso.
• Tercero: Cuando él bebe ya nazca generar el vínculo entre los hermanos, con actividades como por ejemplo que ayude a bañarlo, si es pequeño que pase cosas como el shampoo o la toalla, o que participe en hacerlo jugar dependiendo de la edad del hermano mayor.
• Cuarto: como consejo es recomendable tener nuestro segundo bebe cuando el vínculo con los padres en especial con la mamá este formado del todo y nuestro hijo se sienta seguro y sea mucho más independiente. Lo recomendable según la OMS es tener le segundo hijo después de dos años. Considera que es el tiempo necesario que debe transcurrir para que el cuerpo de la madre esté preparado para volver a concebir un bebé, esto es a nivel físico, pero es necesario recordar la parte emocional como comentaba al inicio.

Es importante recalcar que con la llegada del hermano menor, ya nada será igual, deberemos dividir actividades y tener horarios para cada uno y nunca cometer el típico error de compararlos porque esto en vez de unirlos puede causar rencores, envidias y baja autoestima en nuestros pequeños. Recuerden que todo hijo es distinto y en ello está lo hermoso del ser humano, en ser diferente y único.

Escrito por:

Lic. Eimy Valderrama Barahona

Licenciada en Psicología y Terapeuta Ocupacional

Centro de Desarrollo Humano Zueh